16.5.10

Tenemos miedo.
Somos capaces de llorar por el tiempo,
aunque sepamos que esas lágrimas no tienen mar.

Nos asusta el pasado.
El escrito y el borrado.

Tenemos los pies mordidos.
Miramos el horizonte porque allá está la verdad.
Siempre allá.

Nos encierran las mentiras que inventamos,
pero los muertos nos protegen del abismo.

Tenemos años.
Tejimos nuestros abrigos y nuestras cárceles.
Nos negamos a soportar el frío.

Nos ensuciamos las manos,
y recién entonces entendimos
que ahí en el barro está el sol.