11.11.12

Me preguntaste
con amor o con lástima
si existía un mundo
del que no fuera turista
y yo me quedé quieta
con la piel desvanecida,
con la respuesta desnuda,
con la sangre asesina y ansiosa,
que sólo vive y sólo corre.

A mis ciudades las invadieron.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me da tanto a vos este texto , te visualizo quieta y callada, mirando, sin ver nada .